Leer Mientras Escribes (O Al Revés)

Sentimientos encontrados, la calma después de la tempestad, y una nueva tempestad embistiendo el corazón, estar contigo sin estar, quererte y no poder tenerte, tantas veces me ha pasado, tantas veces lo he sentido…

No se si me duele más la mentira, el engaño, lo mal que me he portado, o la triste realidad de que lo has notado, leerte mientras escribo es una prueba más de tu asombrosa capacidad para enamorarme, de tu increíble manera de ser tan increíble, del gran impacto que provocas en mi sentir, de como leer es la mejor manera de escribir, de lo estúpido que fui al poner barreras tan tontas, de como «me emputa mi actitud».

Las frases de la fiesta, los hashtags, pequeñas reflexiones, la música, el amor, demostrado está que las palabras no siempre se hacen realidad, que de nada sirve decir sin hacer, he pensado tanto en ti, en hoy, que era el día cero, el día en el que para mí (nosotros) todo comenzaba de nuevo, en el que las tinieblas perdían lo místico y se convertían en el claro de una mañana soleada, junto a ti, todo cambió.

Mil veces he escrito que un segundo es lo necesario para cambiar vidas, alguna oración bien estructurada, un beso, una luz roja, un cigarrillo, tu voz, leer imaginando tu voz, teniendo una tarjeta de algún amor pasado junto a mi, una carta que hace poco escribí, tantos sueños sin cumplir, tanto por hacer, dar, crear, vivir, sentir, soñar…

…Entender no es fácil, interpretar se vuelve una tarea emblemáticamente complicada mientras que la discusión se acalora y las palabras cada vez son menos, te leo mientras escribo, te quiero mientras me olvidas.

Para terminar, una cita, Edgar Oceransky dice: «Me preguntas si te quiero, no te puedo contestar, hay respuestas que no caben, ni en la inmensidad del mar».